Lavado nasal
Es muy importante realizar lavados nasales a nuestros niños ya que nos permiten mejorar su respiración, su descanso, prevenir infecciones y disminuir la tos. Estos lavados nasales deben ser a demanda, una manera de saber si nuestro peque lo necesita es fijarnos en si tiene mucho rato la boca abierta, si hay ronquidos, si no puede dormir tumbado o si le cuesta alimentarse. Recordad siempre que esta solución es momentánea y que lo más recomendable es acudir a tu fisiopediatra para que valore de donde viene ese exceso de moco y realice técnicas de fisioterapia respiratoria apropiadas para cada niño.
En niños de 0 a 3 años lo más sencillo es realizarlo con monodosis de suero fisiológico, es muy importante que las monodosis sean de punta redonda para evitar hacer daño a nuestros peques.
¿Cómo hacerlo?
De 0 a 6 meses
Posición: de lado. Introducimos por la fosa nasal superior 2,5 ml de suero como mínimo, hasta que veamos que el suero salga limpio. Repetimos del otro lado y secamos y retiramos el moco con un pañuelo.
De 6 meses a 3 años
Posición: sentado. Introducimos por una fosa nasal 5 ml de suero como mínimo, hasta que veamos que el suero salga limpio. Repetimos del otro lado y secamos y retiramos el moco con un pañuelo.
En niños a partir de 3 años una buena opción es la lota, ya que nos permite una limpieza completa, pero es necesaria la colaboración del niño y que aprenda a realizar un sonado posterior.
Sonado posterior: se respira llevando el moco hacia atrás, cuando la garganta esté cerrada dejamos entrar el aire de golpe. Le pedimos que escupa el moco.
Posición: de pie con la cabeza flexionada y un poco girada. Llenamos la lota con agua tibia, le ponemos una cucharadita de sal y removemos. Hacemos que pase la mitad de agua por la fosa superior respirando por la boca. Realizamos un sonado posterior suave y largo. Repetimos por el otro lado.
A continuación, os dejo un video de cómo hacerlo para que os resulte más fácil. Si tenéis cualquier pregunta no dudéis en contactarme. ¡Muchas gracias!